Los chicos originales de Jersey: Aaron Burr, Jonathan Dayton y los hermanos Ogden
En los anales de la historia temprana de Estados Unidos, los nombres de Aaron Burr, Jonathan Dayton y los hermanos Ogden (Aaron y Matthias) destacan como un grupo de amigos de la infancia que dejaron una huella imborrable en el destino de la nación. Su historia es un relato de riqueza, poder y escándalo, que refleja las ilimitadas oportunidades y las traicioneras trampas de los incipientes Estados Unidos.
De Elizabeth a la guerra
Nacidos en familias prominentes de Elizabeth, Nueva Jersey, los chicos de Jersey crecieron juntos, forjando un vínculo inquebrantable. Burr, el líder carismático e independiente, mostró su espíritu rebelde desde el principio, escapando de casa dos veces. Dayton, dos años menor, era un individuo más tranquilo pero igualmente decidido. Los hermanos Ogden, Matthias y Aaron, eran conocidos por su tamaño y fuerza.
Cuando estalló la Guerra Revolucionaria en 1775, los chicos de Jersey se unieron con entusiasmo a la lucha por la independencia. Matthias Ogden y Burr se ofrecieron como voluntarios para la audaz invasión invernal de Canadá por parte de Benedict Arnold, mientras que Dayton sirvió como pagador en el batallón de su padre. Aaron Ogden más tarde se distinguió en la batalla de Yorktown, ganándose los elogios de George Washington.
Ambiciones políticas
Después de la guerra, los chicos de Jersey se embarcaron en sus carreras políticas. Dayton se convirtió en el delegado más joven de la Convención Constitucional, donde abogó por un gobierno federal fuerte. Burr, elegido senador del estado de Nueva York, emergió como una figura republicana prominente. Aaron Ogden ejerció la abogacía en Nueva Jersey, mientras que Matthias Ogden persiguió varias empresas comerciales.
El ascenso y la caída de Aaron Burr
Las ambiciones políticas de Burr alcanzaron su punto máximo cuando fue elegido vicepresidente en 1801. Sin embargo, su percibida independencia condujo a una amarga rivalidad con el presidente Thomas Jefferson. En 1804, la participación de Burr en un duelo con Alexander Hamilton resultó en su caída política. Acusado de asesinato, huyó al oeste, donde tramó un audaz plan para establecer un imperio en el territorio de Luisiana.
Los chicos de Jersey y la conspiración de Burr
Dayton y Aaron Ogden desempeñaron papeles fundamentales en la desafortunada conspiración de Burr. Dayton sirvió como asistente principal de Burr, mientras que Aaron Ogden lo defendió en el juicio por asesinato en Nueva Jersey. El complot finalmente fracasó y Burr fue arrestado y juzgado por traición. Sin embargo, el fallo histórico del presidente del Tribunal Supremo John Marshall absolvió a Burr, poniendo fin efectivamente al caso contra Dayton.
Barcos de vapor y comercio interestatal
Después de la conspiración de Burr, los chicos de Jersey centraron su atención en los barcos de vapor, la maravilla tecnológica de la época. Aaron Ogden compró una planta de máquinas de vapor y desafió el monopolio de Robert Fulton sobre el comercio del río Hudson. Siguió una larga batalla legal, que culminó en el caso de la Corte Suprema Gibbons contra Ogden. El fallo de Marshall anuló el monopolio de Ogden, estableciendo la autoridad del gobierno federal sobre el comercio interestatal.
Amistades duraderas y legados
A pesar de sus reveses políticos y financieros, la amistad de los chicos de Jersey se mantuvo fuerte. En 1824, Ogden y Dayton organizaron conjuntamente al Marqués de Lafayette, un conocido cercano de la Guerra Revolucionaria. Dayton falleció unas semanas más tarde, dejando un legado de servicio y patriotismo.
Aaron Ogden y Burr continuaron residiendo en Nueva Jersey durante muchos años. Burr murió en 1836, mientras que Ogden falleció en 1839. Sus largas y agitadas vidas reflejaron los desafíos y triunfos de la primera república estadounidense, donde individuos audaces y ambiciosos podían alcanzar grandes alturas, pero también enfrentar las consecuencias de sus acciones.
La historia de los chicos de Jersey sirve como testimonio de la compleja y a menudo contradictoria naturaleza de la ambición humana. Su búsqueda de riqueza y poder les trajo fama y fortuna, pero también condujo a amargas rivalidades, escándalos políticos y tragedia personal. Sin embargo, a pesar de todo, su amistad perduró, un recordatorio de los vínculos duraderos que pueden dar forma a nuestras vidas.