La joya de los Teton: el legado de los Rockefeller en el Parque Nacional Grand Teton
La donación de los Rockefeller
Este verano, la familia Rockefeller hará una donación final de 1106 acres al Parque Nacional Grand Teton, abriendo al público por primera vez en 75 años una espectacular parcela de naturaleza salvaje. El Rancho JY, una propiedad paisajística con lagos en plena naturaleza y diversos entornos naturales, ha sido inaccesible desde 1932, cuando el filántropo John D. Rockefeller Jr. lo adquirió como refugio de verano.
La historia de Jackson Hole y los Teton
Jackson Hole, un valle de alta montaña de 55 millas de largo dominado por el Grand Teton de 13.770 pies, tiene una rica historia. Las primeras en acampar en la zona fueron las tribus nativas americanas, seguidas por los tramperos que acuñaron el término «agujero» para describir la inusual meseta alta rodeada de montañas. A principios del siglo XX, los ricos del este comenzaron a visitar el valle, atraídos por sus impresionantes paisajes y oportunidades de recreación al aire libre.
La creación del Parque Nacional Grand Teton
John D. Rockefeller Jr. visitó Jackson Hole por primera vez en 1926 y quedó cautivado por la belleza de las montañas Teton. Preocupado por la amenaza del desarrollo en la región, comenzó en secreto a adquirir tierras con la intención de donarlas al gobierno para crear un parque nacional. En 1943, el presidente Franklin D. Roosevelt designó gran parte del valle como monumento nacional, y en 1950, se estableció el ampliado Parque Nacional Grand Teton.
El Rancho JY y la familia Rockefeller
El Rancho JY fue una de las parcelas que Rockefeller adquirió en la década de 1930. Se enamoró del refugio rústico y pasó allí muchos veranos con su familia. Sin embargo, su hijo Laurance se encariñó especialmente con la propiedad y convenció a su padre de que la conservara cuando donó la mayor parte de sus propiedades de Jackson Hole al parque en 1949. Laurance comenzó a donar partes del JY en la década de 1980, y los últimos 1106 acres se entregarán este septiembre.
La importancia de la conservación
La creación del Parque Nacional Grand Teton fue una gran victoria para los conservacionistas. El parque protege un vasto y diverso ecosistema, que incluye lagos alpinos, picos montañosos, bosques y praderas. Alberga una gran variedad de vida silvestre, incluidos alces, ciervos, osos y águilas. El parque también sirve como un corredor migratorio vital para la vida silvestre, asegurando la salud a largo plazo del ecosistema.
El legado de los Rockefeller
La familia Rockefeller ha desempeñado un papel fundamental en la conservación de Jackson Hole y las montañas Teton. La visión de John D. Rockefeller Jr. de un parque nacional se ha hecho realidad, y el apoyo continuo de su familia ha asegurado la protección de esta naturaleza salvaje prístina para las generaciones futuras.
El futuro del Rancho JY
La incorporación del Rancho JY al Parque Nacional Grand Teton brindará a los visitantes nuevas oportunidades para explorar el interior de la región. Se construirán un centro de visitantes de última generación y un sendero circular de cuatro millas hasta el lago Phelps, lo que permitirá a los visitantes experimentar la belleza natural del área mientras minimizan su impacto en el medio ambiente. Los edificios históricos del rancho, muchos de los cuales datan de su época como rancho para turistas, serán preservados e interpretados para los visitantes.
La belleza de los Teton
Las montañas Teton son algunos de los picos más emblemáticos de los Estados Unidos. Sus cimas irregulares y nevadas se elevan sobre los lagos verde esmeralda y los exuberantes prados de Jackson Hole, creando un paisaje de belleza incomparable. Las montañas ofrecen una amplia gama de oportunidades recreativas, desde senderismo y escalada hasta pesca y paseos en bote.
La importancia de la naturaleza salvaje
Las áreas silvestres son vitales para la salud del planeta y el bienestar de los seres humanos. Proporcionan hábitat para la vida silvestre, protegen la calidad del agua y ofrecen oportunidades para la recreación y la renovación espiritual. La incorporación del Rancho JY al Parque Nacional Grand Teton ayudará a garantizar que las generaciones futuras puedan seguir disfrutando de la belleza y los beneficios de la naturaleza salvaje.