Cultivo y cuidado de las capuchinas: guía completa
Descripción general
Las capuchinas son plantas versátiles de flores vibrantes que añaden un toque de color y un placer culinario a cualquier jardín. Con sus hojas y flores comestibles, son las favoritas de los jardineros que buscan belleza y funcionalidad. Esta completa guía te brindará todos los conocimientos y técnicas esenciales para cultivar y cuidar con éxito estas encantadoras plantas.
Variedades y usos
La diversa familia de las capuchinas abarca más de 80 especies, que ofrecen una amplia gama de hábitos de crecimiento y colores de flores. Desde densas cubiertas vegetales hasta variedades colgantes que caen en cascada sobre bordes y paredes, hay una capuchina adecuada para cada necesidad de jardinería. Sus hojas y flores comestibles, con un toque picante característico, las convierten en una delicia culinaria. A menudo se utilizan en ensaladas, como guarnición o incluso como sustituto del berro.
Plantación y propagación
Las capuchinas prosperan en suelos bien drenados con un pH entre 6 y 8. Prefieren el pleno sol, pero pueden tolerar la sombra parcial. Para empezar a cultivar capuchinas, puedes sembrar semillas directamente en el jardín o comprar plantones en un vivero. Las semillas germinan rápidamente y producen flores en un corto período de tiempo.
Si deseas propagar nuevas plantas, puedes hacerlo fácilmente tomando esquejes de capuchinas maduras. Simplemente selecciona un tallo sano con al menos tres hojas, sumerge el extremo cortado en hormona de enraizamiento e insértalo en una maceta llena de tierra para macetas. Mantén la tierra húmeda y proporciona abundante luz solar para un enraizamiento exitoso.
Cuidado y mantenimiento
Las capuchinas son plantas de relativamente bajo mantenimiento que requieren un cuidado mínimo para prosperar. Riégalas regularmente, especialmente durante el clima cálido y seco. Por lo general, no es necesario fertilizarlas, ya que prefieren suelos que no sean demasiado ricos.
La poda puede ayudar a promover el crecimiento y la floración nuevos. Para las variedades colgantes, recorta los tallos más largos de 6 a 12 pulgadas a mediados del verano y nuevamente a fines del verano. Para las variedades tupidas, pellizcar las flores marchitas y las hojas secas mejorará su apariencia general.
Plagas y enfermedades
Los pulgones son plagas comunes que pueden infestar las plantas de capuchina. Para controlarlos, utiliza un fuerte chorro de agua de una manguera de jardín o aplica un aerosol no tóxico hecho con vinagre diluido o aceites esenciales. Plantar hierba gatera junto a las capuchinas también puede disuadir a estas plagas.
La mancha bacteriana de la hoja es una enfermedad que puede afectar a las capuchinas en condiciones inadecuadas. Para prevenir o minimizar este problema, proporciona suficiente circulación de aire entre las plantas y riega con riego por goteo en lugar de aspersores.
Solución de problemas comunes
- Falta de floración: Si tu planta de capuchina no florece, puede deberse a una fertilidad excesiva del suelo. Reduce la fertilidad del suelo evitando fertilizantes y considera podar la planta para estimular la producción de flores.
- Pudrición de la raíz: Las capuchinas prefieren suelos bien drenados. Si el suelo está anegado, la planta puede desarrollar pudrición de la raíz. Asegura un drenaje adecuado eligiendo un lugar de siembra con suelo arenoso o añadiendo piedras o guijarros al fondo de los recipientes.
- Obstrucción de las flores: Algunas variedades de capuchina tienen un hábito de crecimiento que obstruye la producción de flores. Elige variedades que mantengan sus flores por encima de sus hojas para permitir que la luz solar llegue a los capullos.
Siembra complementaria
Las capuchinas son excelentes plantas compañeras en el huerto. Sus fitoquímicos transportados por el aire disuaden a una amplia gama de plagas, incluidas moscas blancas, chinches de calabaza, pulgones, escarabajos y gusanos de col. Al plantar capuchinas cerca de vegetales vulnerables, puedes protegerlos naturalmente de estos insectos dañinos.
Usos culinarios
Las hojas y flores de las capuchinas son comestibles y añaden un sabor picante único a los platos. Se pueden utilizar en ensaladas, sándwiches, salsas y como guarnición para postres. Las semillas también se pueden encurtir o prensar para obtener aceite.
Consejos adicionales
- Siembra semillas de capuchina directamente en el jardín después de la última helada de primavera.
- Comienza las semillas en el interior de dos a cuatro semanas antes de la fecha promedio de la última helada de primavera para una floración más temprana.
- Utiliza macetas de turba o papel al iniciar las semillas en el interior para reducir el choque del trasplante.
- Planta capuchinas en macetas para darles un efecto colgante o trepador.
- Quitar las flores marchitas fomentará la floración continua.
- Permite que las plantas sanas vuelvan a sembrarse para una población autosostenible en los años siguientes.