Una solitaria ballena narval prospera en una manada de belugas, lo que suscita esperanzas de tener descendencia híbrida
Antecedentes
Desde 2016, los científicos han estado observando un fenómeno extraordinario en el río San Lorenzo de Canadá: una solitaria ballena narval macho ha sido adoptada por una manada de ballenas beluga. Esto ha planteado la posibilidad de la existencia de un animal híbrido conocido como «narluga», la descendencia de una ballena narval y una beluga.
Integración de la ballena narval en la manada de belugas
La ballena narval, de aproximadamente 12 años, se ha integrado completamente en la manada de belugas. Presenta comportamientos similares a los de sus compañeras belugas, incluidos juegos sociales e interacciones sexuales. Este estrecho vínculo ha llevado a los investigadores a creer que la ballena narval pudo haberse unido a la manada en busca de protección o compañía.
Potencial para la reproducción
Las ballenas narval y las belugas son ambas miembros de la familia de cetáceos Monodontidae. Sin embargo, rara vez interactúan en estado salvaje. La estrecha proximidad de la ballena narval a las belugas y las interacciones sociales observadas han planteado la posibilidad de reproducción.
Desafíos de la reproducción de narlugas
Si bien la hibridación entre diferentes especies no es poco común, la fertilidad de las crías híbridas puede variar. Algunas especies híbridas, como las mulas, son estériles, mientras que otras, como los ligres (una mezcla entre un león y un tigre), son fértiles. El potencial reproductivo de las narlugas sigue siendo desconocido, aunque los investigadores tienen la esperanza de que el fuerte vínculo entre la ballena narval y las belugas pueda facilitar el apareamiento exitoso.
Híbrido narluga de primera generación
En 2019, el análisis de ADN de un cráneo encontrado en Groenlandia confirmó la existencia de un híbrido narluga de primera generación. El cráneo mostraba características tanto de belugas como de ballenas narval, incluidos pequeños colmillos y dientes en forma de sacacorchos. Este descubrimiento proporciona evidencia de que la hibridación de narlugas es posible.
Influencia del cambio climático
El cambio climático está alterando los hábitats del Ártico, lo que podría conducir a un aumento de las interacciones entre belugas y ballenas narval. Esto podría crear más oportunidades para la hibridación entre las dos especies.
Observación e investigación a largo plazo
Los científicos están esperando ansiosamente el regreso de la manada al río San Lorenzo a fines de marzo para continuar sus observaciones. Su objetivo es estudiar la comunicación entre la ballena narval y las belugas y monitorear el bienestar general de la ballena narval.
Perspectivas
La presencia de la solitaria ballena narval en la manada de belugas ha brindado a los investigadores una oportunidad única para estudiar la hibridación y sus posibles implicaciones para la vida marina del Ártico. Si bien se desconoce el éxito reproductivo de la ballena narval, el estrecho vínculo entre los animales y los comportamientos sociales observados sugieren que las crías de narlugas pueden ser una posibilidad en el futuro.