Cómo diseñar la piscina perfecta para hacer largos en casa
Las piscinas para hacer largos son una forma estupenda de hacer ejercicio y disfrutar del aire libre, y pueden ser una hermosa adición a cualquier patio trasero. Pero antes de empezar a planificar tu piscina, hay algunas cosas que debes tener en cuenta.
¿Qué es una piscina para hacer largos?
Las piscinas para hacer largos son piscinas largas y estrechas que se utilizan normalmente para hacer ejercicio. Suelen ser rectangulares y su longitud varía entre 45 y 75 pies. La única piscina para hacer largos de longitud estándar es la piscina olímpica, que mide 50 metros de largo.
Historia de las piscinas para hacer largos
Las piscinas para hacer largos existen desde hace siglos. Los antiguos griegos y romanos construyeron piscinas que probablemente se utilizaban para el entrenamiento deportivo y los ejercicios militares. A principios de la década de 1970, el diseñador de jardines Cleo Baldon llevó la piscina para hacer largos a California, y rápidamente se convirtió en una opción popular para los propietarios que querían una piscina para hacer ejercicio.
Consideraciones para el diseño de una piscina para hacer largos
Al diseñar tu piscina, hay algunas cosas que debes tener en cuenta:
- Longitud: La longitud de tu piscina dependerá del espacio que tengas y de cuánto quieras nadar. La longitud mínima recomendada para una piscina para hacer largos es de 45 pies, pero las piscinas pueden tener hasta 75 pies de largo.
- Anchura: Las piscinas para hacer largos suelen tener entre 8 y 10 pies de ancho, pero pueden ser más anchas si tienes espacio.
- Profundidad: La profundidad de tu piscina dependerá de cómo planees utilizarla. Si vas a utilizarla principalmente para nadar largos, querrás una profundidad de al menos 4 pies. Si planeas utilizarla para otras actividades, como jugar con niños, puede que prefieras una profundidad menor.
- Forma: Las piscinas para hacer largos suelen ser rectangulares, pero también pueden ser ovaladas o en forma de L.
- Materiales: Las piscinas para hacer largos pueden fabricarse con diversos materiales, como hormigón, fibra de vidrio y vinilo.
- Cubierta: La cubierta es una parte importante del diseño de tu piscina para hacer largos. Proporciona un lugar para sentarse y relajarse, y también puede ayudar a evitar que entren residuos en la piscina.
- Calefacción: Si planeas utilizar tu piscina para hacer largos durante todo el año, necesitarás calentarla. Hay varias opciones de calefacción disponibles, como calentadores de gas, calentadores eléctricos y calentadores solares.
- Cobertura: Una cobertura para piscina puede ayudar a mantenerla limpia y caliente, y también puede reducir tus costes energéticos. Hay varias coberturas para piscina disponibles, como mantas térmicas y coberturas totalmente automáticas.
Cómo construir una piscina para hacer largos
Construir una piscina para hacer largos es un proyecto complejo, y es importante contratar a un contratista cualificado para que haga el trabajo. El proceso de construcción de una piscina para hacer largos suele implicar los siguientes pasos:
- Excavar el solar de la piscina
- Instalar la carcasa de la piscina
- Conectar la piscina a la tubería
- Instalar el sistema eléctrico
- Terminar la cubierta de la piscina
Cómo utilizar una piscina para hacer largos
Las piscinas para hacer largos son una forma estupenda de hacer ejercicio y disfrutar del aire libre. Aquí tienes algunos consejos para utilizar tu piscina para hacer largos:
- Empieza poco a poco y aumenta gradualmente la distancia y la intensidad de tus entrenamientos.
- Utiliza una brazada que te resulte cómoda y te permita respirar con facilidad.
- Tómate descansos cuando lo necesites y no te esfuerces demasiado.
- Mantente hidratado bebiendo mucha agua antes, durante y después de tu entrenamiento.
Cómo mantener una piscina para hacer largos
Las piscinas para hacer largos requieren un mantenimiento regular para mantenerlas limpias y en buenas condiciones. Aquí tienes algunos consejos para mantener tu piscina para hacer largos:
- Limpia el filtro de la piscina con regularidad.
- Comprueba la química del agua de la piscina semanalmente y ajústala según sea necesario.
- Aspira la piscina con regularidad para eliminar los residuos.
- Cepilla las paredes y los escalones de la piscina con regularidad para eliminar las algas.
- Aplica un tratamiento de choque a la piscina semanalmente para eliminar las bacterias.
Siguiendo estos consejos, puedes mantener tu piscina limpia y en buenas condiciones durante años.