La contaminación de Hawái provoca tumores mortales en las tortugas marinas
Fibropapillomatosis: Una amenaza mortal para las tortugas marinas verdes
En las aguas que rodean Hawái, las tortugas marinas verdes, una especie en peligro de extinción, se enfrentan a una amenaza mortal: la fibropapillomatosis, una enfermedad que provoca el crecimiento de tumores en su rostro, aletas y órganos internos. Esta enfermedad es una de las principales causas de muerte de las tortugas, y los científicos han descubierto recientemente que la escorrentía de nitrógeno de las ciudades y las granjas está provocando brotes de la enfermedad.
Escorrentía de nitrógeno y crecimiento de algas
La escorrentía de nitrógeno derivada de actividades humanas, como el uso de fertilizantes y el vertido de aguas residuales, llega al océano y provoca un rápido crecimiento de las algas. Las tortugas se alimentan de algas y, cuando consumen algas que han estado expuestas a altos niveles de nitrógeno, ingieren grandes cantidades de arginina, un aminoácido que favorece el crecimiento del virus causante de la fibropapillomatosis.
El papel de la arginina en la fibropapillomatosis
La arginina es un nutriente clave para el virus que causa la fibropapillomatosis. Cuanta más arginina consuma una tortuga, mayor será la probabilidad de que desarrolle la enfermedad. Los investigadores han descubierto que las tortugas con fibropapillomatosis tienen niveles más altos de arginina en su sangre y tejidos que las tortugas sanas.
Otros factores que contribuyen a la fibropapillomatosis
Además de la arginina, otros factores también pueden contribuir al desarrollo de la fibropapillomatosis en las tortugas marinas. Estos factores incluyen:
- Prolina y glicina: Estas moléculas, que suelen encontrarse en el tejido canceroso humano, también se han encontrado en niveles elevados en tortugas con fibropapillomatosis.
- Supresión del sistema inmunitario: La contaminación y otros factores estresantes ambientales pueden debilitar el sistema inmunitario de las tortugas, haciéndolas más susceptibles a la fibropapillomatosis.
- Factores genéticos: Algunas tortugas pueden estar más predispuestas genéticamente a desarrollar fibropapillomatosis que otras.
El impacto de la escorrentía de nitrógeno en las tortugas
El vínculo entre la escorrentía de nitrógeno y la fibropapillomatosis en las tortugas marinas es cada vez más evidente. Los estudios han demostrado que las tortugas que viven en zonas con mayores concentraciones de nitrógeno en el agua tienen más probabilidades de desarrollar la enfermedad. Esto sugiere que la reducción de la escorrentía de nitrógeno podría ayudar a proteger a las tortugas de la fibropapillomatosis.
Estrategias para reducir la escorrentía de nitrógeno
Existen varias estrategias que se pueden implementar para reducir la escorrentía de nitrógeno y proteger a las tortugas marinas de la fibropapillomatosis. Estas estrategias incluyen:
- Mejorar el tratamiento de aguas residuales: Modernizar las plantas de tratamiento de aguas residuales para eliminar más nitrógeno de las aguas residuales antes de verterlas al océano.
- Reducir el uso de fertilizantes: Utilizar los fertilizantes de forma más eficiente y reducir la cantidad de fertilizante aplicado a los cultivos.
- Restaurar los humedales: Los humedales actúan como filtros naturales que eliminan el nitrógeno del agua antes de que llegue al océano. La restauración de los humedales puede ayudar a reducir la escorrentía de nitrógeno.
- Educar al público: Concienciar sobre el impacto de la escorrentía de nitrógeno en las tortugas marinas y animar a las personas a tomar medidas para reducir su huella de nitrógeno.
Conclusión
La fibropapillomatosis es una grave amenaza para las tortugas marinas verdes de Hawái. La escorrentía de nitrógeno derivada de actividades humanas es un factor importante que contribuye a la enfermedad. Reduciendo la escorrentía de nitrógeno, podemos ayudar a proteger a las tortugas marinas y garantizar su supervivencia en las aguas hawaianas.