David Goldblatt: Un fotógrafo sudafricano que capturó la vida bajo el apartheid
Primeros años e influencias
David Goldblatt, nacido en 1930 en un pueblo minero cerca de Johannesburgo, creció durante el auge del Partido Nacional. Las políticas de apartheid del partido marginaron sistemáticamente a los sudafricanos no blancos.
En este contexto, Goldblatt desarrolló un interés por la fotografía, inspirado por revistas como Life y Picture Post. Inicialmente aspiraba a convertirse en fotógrafo de revistas, pero cambió su enfoque para documentar la lucha contra el apartheid.
Documentando el apartheid
Las fotografías de Goldblatt capturaron las realidades cotidianas de la vida bajo el apartheid. Evitó los eventos violentos, enfocándose en cambio en las formas sutiles pero omnipresentes en que la discriminación moldeaba la vida de las personas.
Una de sus imágenes más icónicas, tomada en 1965, muestra a un niño blanco de pie junto a su niñera negra, Heimweeberg. La cerca de alambre de púas en el fondo simboliza las divisiones impuestas por el apartheid.
El libro de Goldblatt de 1989, «The Transported of KwaNdebele», documenta el largo y arduo viaje que los sudafricanos negros soportaban para llegar a los centros urbanos desde las áreas segregadas donde se veían obligados a vivir.
Reconocimiento internacional y legado
El trabajo de Goldblatt ganó reconocimiento internacional. En 1998, se convirtió en el primer artista sudafricano en tener una exposición individual en el Museo de Arte Moderno (MOMA) de Nueva York. Sus fotografías han sido exhibidas en museos de todo el mundo.
Antes de su muerte, Goldblatt legó su archivo de negativos a la Universidad de Yale. Esta decisión fue controvertida, ya que anteriormente había prometido la colección a la Universidad de Ciudad del Cabo. Retiró su colección después de que manifestantes estudiantiles quemaran obras de arte en el campus que consideraban «símbolos coloniales.»
El trabajo de Goldblatt continúa inspirando y desafiando a los espectadores. Su compromiso con la documentación de las injusticias del apartheid y su creencia en el poder del diálogo y la democracia siguen siendo relevantes hoy en día.
Estilo fotográfico de Goldblatt
Goldblatt trabajó principalmente en blanco y negro, creyendo que el color era demasiado «dulce» para transmitir las duras realidades del apartheid. En la década de 1990, comenzó a experimentar con el color, pero su misión de capturar Sudáfrica a través de una lente de integridad y moralidad no cambió.
Goldblatt se describía a sí mismo como un «trabajador constante,» persiguiendo consistentemente su visión fotográfica durante décadas. Su trabajo refleja una profunda comprensión de las dinámicas sociales y políticas de su país.
Impacto de Goldblatt en la sociedad sudafricana
Las fotografías de Goldblatt jugaron un papel significativo en la configuración de la comprensión mundial del apartheid. Sus imágenes expusieron la brutalidad y la absurdidad del sistema, contribuyendo a la presión internacional que eventualmente llevó a su caída.
El trabajo de Goldblatt sigue resonando con los sudafricanos hoy en día. Sirve como un recordatorio del pasado del país y como un catalizador para las conversaciones continuas sobre la raza, la desigualdad y la importancia de la reconciliación.