Las estatuas de Lucille Ball: una historia de dos Lucys
La inauguración de «La nueva Lucy»
En el pintoresco pueblo de Celoron, Nueva York, donde Lucille Ball pasó su infancia, ha surgido una nueva estatua para honrar a la querida comediante. Esculpida por la artista Carolyn Palmer, «La nueva Lucy» se yergue orgullosa en el Parque Conmemorativo Lucille Ball, capturando la esencia de Ball en su icónico estilo. Vestida con un vestido de lunares, tacones altos, collar de perlas y cabello perfectamente peinado, la estatua irradia el glamour y el espíritu que convirtieron a Ball en un nombre familiar.
La controversia de «La terrorífica Lucy»
En 2009, se inauguró en Celoron otra estatua de Lucille Ball, apodada «La terrorífica Lucy». Creada por el artista Dave Poulin, la escultura de bronce mostraba a Ball sosteniendo una botella del ficticio suplemento alimenticio Vitameatavegamin, un guiño a un episodio clásico de «Yo amo a Lucy». Sin embargo, el aspecto grotesco de la estatua, con una mueca distorsionada, provocó críticas generalizadas. Tanto los lugareños como los fanáticos pidieron su eliminación, y el propio Poulin expresó más tarde su insatisfacción con el resultado.
La respuesta del público
La presentación de «La terrorífica Lucy» desató un acalorado debate en Celoron. Los residentes se organizaron para que se retirara la estatua, mientras que otros defendían su mérito artístico. La estatua se convirtió en fuente de fascinación y burla, atrayendo a miles de visitantes ansiosos por ver la extraña creación. A pesar de la controversia, «La terrorífica Lucy» permaneció en el parque durante años, un testimonio del perdurable poder de la opinión pública.
La evolución de las estatuas de Lucille Ball
La estética contrastante de «La nueva Lucy» y «La terrorífica Lucy» pone de relieve la evolución de las estatuas de Lucille Ball en Celoron. «La nueva Lucy» representa un enfoque más tradicional, capturando la imagen de Ball de una manera halagadora e idealizada. «La terrorífica Lucy», por otro lado, refleja una interpretación más poco convencional y humorística del legado de la comediante. Las dos estatuas brindan a los visitantes una oportunidad única de explorar diferentes facetas de la personalidad de Ball.
El significado del arte público
El debate en torno a las estatuas de Lucille Ball en Celoron subraya la importancia del arte público para dar forma al panorama cultural de una comunidad. Las estatuas y otras formas de arte público sirven como símbolos de valores compartidos, acontecimientos históricos y figuras influyentes. Pueden inspirar orgullo, fomentar el diálogo y atraer visitantes de todas partes.
El legado de Lucille Ball
Tanto «La nueva Lucy» como «La terrorífica Lucy» rinden homenaje al legado perdurable de Lucille Ball como una de las mujeres más innovadoras de la comedia estadounidense. Su capacidad para hacer reír al público y conectar con sus personajes ha dejado una huella imborrable en la cultura popular. Las estatuas de Celoron sirven como recordatorio del talento de Ball, su impacto en el mundo y su conexión especial con el pueblo donde creció.
Una peregrinación para los fans
Para los fanáticos de Lucille Ball, una visita a Celoron es imprescindible. La presencia de «La nueva Lucy» y «La terrorífica Lucy» ofrece una visión de la personalidad polifacética de Ball y del poder perdurable de su legado. Ya sea que elijan admirar a la más convencional «La nueva Lucy» o a la peculiar «La terrorífica Lucy», los visitantes se irán con un aprecio más profundo por la comediante que trajo tanta alegría al mundo.