Cómo una morsa llegó a las costas de Gales
Descubrimiento e identificación inicial
El 20 de marzo, la RSPCA de Gales recibió una llamada inusual. Por primera vez en sus 200 años de historia, se les pidió que investigaran una morsa del Atlántico descansando en la costa de Pembrokeshire. Esta morsa joven, aproximadamente del tamaño de una vaca, se convirtió rápidamente en una celebridad local, y los residentes sugirieron nombres como Wally, Isabelle y Cain.
Origen y viaje
Los expertos creen que esta morsa probablemente se originó en Groenlandia o en el archipiélago noruego de Svalbard. Las fotografías sugieren que nadó desde Irlanda hasta Gales en unos seis días, cubriendo una distancia de aproximadamente 250 millas. Se sospecha que es la misma morsa avistada en Dinamarca a mediados de febrero.
Características físicas y salud
La morsa tiene colmillos de menos de cuatro pulgadas de largo, una característica común entre las morsas. Los biólogos no pudieron determinar su sexo basándose únicamente en sus colmillos. A pesar de estar lejos de su hogar, la morsa parecía gozar de relativamente buena salud. La oficial de rescate de animales de RSPCA, Ellie West, observó que estaba descansando y ligeramente bajo de peso, pero no mostraba signos de enfermedad o lesión.
Comportamiento y hábitos
Se sabe que las morsas descansan en tierra o en el hielo marino, que se está volviendo cada vez más escaso debido al cambio climático. La morsa en Gales descansó durante unos dos días antes de regresar al mar el 22 de marzo. Por lo general, nada a una velocidad promedio de aproximadamente cuatro millas por hora, ayudado por su espesa capa de grasa aislante.
Preocupaciones de conservación
La RSPCA y Welsh Marine Life Rescue monitorearon de cerca a la morsa durante su estadía en Pembrokeshire para garantizar su bienestar y evitar molestias. Lucy Babey, quien lidera la ciencia y la conservación en ORCA, enfatizó la importancia de mantener una distancia segura de la morsa. «Este animal estará bastante exhausto por toda su natación», dijo. «Probablemente estará estresado ya que no se encuentra en un entorno al que esté acostumbrado».
Contexto histórico y avistamientos previos
Si bien esta fue la primera vez que se vio una morsa en la costa de Pembrokeshire, no es el primer caso de morsas que visitan Irlanda y Gales. Desde 1979, ha habido ocho avistamientos confirmados de morsas en Irlanda y algunos en Escocia. En 2018, se observó una morsa viajando por varias islas de Escocia durante varios meses.
Importancia científica
La presencia de una morsa en Gales pone de relieve la interconexión de los ecosistemas marinos y el potencial de desplazamiento a larga distancia de estos animales. También plantea interrogantes sobre el impacto del cambio climático en las poblaciones de morsas y su capacidad para encontrar lugares adecuados para descansar y alimentarse.
Respuesta del público y precauciones de seguridad
El Irish Whale and Dolphin Group compartió fotografías que comparan la morsa avistada en Irlanda con la de Gales, sugiriendo que pueden ser el mismo individuo. La RSPCA ha solicitado que el público no se acerque a la morsa si reaparece y que mantenga una distancia segura tanto para el bienestar del animal como para su propia seguridad.