Cómo cuidar tu árbol de Navidad
Cómo seleccionar un árbol de Navidad fresco
- Inspecciona las agujas: Las agujas deben ser de un color verde intenso y estar firmemente unidas a las ramas. Evita los árboles con agujas descoloridas o caídas.
- Revisa las ramas: Pasa tu mano sobre una rama. Debe sentirse flexible, no quebradiza.
- Corta la base del árbol: Después de seleccionar tu árbol, corta un disco de 1/2 pulgada de la base del tronco. Haz un corte recto para asegurar una óptima absorción de agua.
Cómo regar tu árbol de Navidad
- Riego diario: Los árboles de Navidad frescos requieren riego diario, especialmente en los primeros días después de llevarlos a casa.
- Cantidad de agua: Los árboles de 6 pies necesitan aproximadamente un galón de agua al día. Ajusta esta cantidad según el tamaño de tu árbol.
- Sumerge el tronco: Llena el soporte del árbol con agua para que el tronco cortado quede completamente sumergido. Controla el nivel de agua diariamente y añade suficiente agua para mantener el tronco sumergido.
Cómo elegir el soporte adecuado para el árbol de Navidad
- Capacidad: El soporte debe contener al menos 1 cuarto de agua por pulgada de diámetro del tronco.
- Evita encoger el tronco: No reduzcas el tamaño del tronco para que quepa en un soporte demasiado pequeño. Las capas externas del tronco conducen el agua.
Cómo seleccionar la ubicación adecuada
- Evita fuentes de calor: Mantén el árbol alejado de chimeneas, respiraderos, radiadores y ventanas grandes que den al sur o al oeste. El calor puede hacer que el árbol se seque prematuramente.
- Considera un árbol vivo: Si tienes un árbol vivo, limita el tiempo que pasa en la casa a un máximo de una semana o 10 días. Mantenlo en un área sin calefacción y protegida hasta justo antes de Navidad.
Cómo cuidar un árbol de Navidad vivo
- Riega regularmente: Riega el árbol profundamente hasta que el agua salga por el fondo. El suelo debe estar ligeramente húmedo, pero no empapado.
- Protege las raíces: Si el árbol aún no está en maceta, envuelve el cepellón en plástico para evitar que las raíces se sequen.
- Acostumbra a las temperaturas exteriores: Después de las fiestas, acostumbra gradualmente el árbol a las temperaturas exteriores manteniéndolo en un área protegida durante varios días.
- Replantación: Si el suelo no está congelado, replanta el árbol de inmediato. De lo contrario, pasa el invierno al árbol en un garaje o porche sin calefacción donde no esté expuesto al sol ni al viento.
Consejos adicionales
- Evita aditivos: No agregues azúcar, aspirina, lejía o conservantes florales comerciales al agua en el soporte del árbol de Navidad. Estos aditivos no mantendrán el árbol más fresco.
- Revisa el nivel de agua diariamente: Controla el nivel de agua diariamente y agrega agua según sea necesario para mantener el tronco sumergido.
- Mantén el árbol alejado de mascotas y niños: Los árboles de Navidad pueden ser peligrosos para las mascotas y los niños. Mantén el árbol fuera de su alcance y supervisa a los niños que estén cerca de él.
Siguiendo estos consejos, puedes asegurarte de que tu árbol de Navidad permanezca fresco y vibrante durante toda la temporada navideña.